La extensa jugabilidad de Assassin's Creed Valhalla y numerosas misiones secundarias generaron críticas, lo que llevó a Ubisoft a refinar la experiencia de su próximo título, Assassin's Creed: Shadows of Japan. Los desarrolladores apuntan a un enfoque más simplificado y equilibrado.
El director del juego, Charles Benoit, declaró que completar la historia principal en las sombras tomará aproximadamente 50 horas, mientras que la finalización completa, incluidas todas las actividades secundarias, requerirá alrededor de 100 horas. Esta es una reducción significativa en comparación con el rango de tiempo de juego estimado de 60-150 horas de Valhalla. El enfoque de Ubisoft es reducir el contenido opcional para evitar jugadores abrumadores, creando un mejor equilibrio entre la progresión narrativa y las actividades opcionales. El objetivo es mejorar el disfrute del juego sin sacrificar la riqueza mundial o la profundidad narrativa. Los jugadores que buscan un juego extenso no experimentarán un compromiso en la calidad, mientras que aquellos que priorizan la historia pueden completar el juego dentro de un plazo más razonable.
Jonathan Dumont, otro director de juego, destacó el impacto del viaje de investigación del equipo a Japón. La escala de los castillos japoneses, los paisajes montañosos y los bosques densos influyeron profundamente en el desarrollo del juego, lo que llevó a un mayor énfasis en el realismo y los detalles.
Un cambio clave implica la geografía mundial. Los tiempos de viaje entre los puntos de interés serán más largos, lo que refleja el mundo abierto más expansivo y natural. Sin embargo, este mayor tiempo de viaje se compensará por ubicaciones significativamente más ricas y más detalladas. A diferencia de Assassin's Creed Odyssey, donde los puntos de interés se agruparon con frecuencia, las sombras presentan una distribución espacial más realista, alentando la exploración e inmersión en el entorno japonés meticulosamente elaborado. Dumont enfatiza el nivel de detalle significativamente más alto en las sombras, prometiendo una experiencia japonesa verdaderamente inmersiva.